El 2 de diciembre de 1960, Melchor Díaz-Pinés Pinés, envió la siguiente información al diario madrileño de noticias, ' YA '.
Siete 'Cruces de Guerra' consiguieron en la Campaña de Cuba, la llamada 'Guerra de la Independencia cubana' entre 1895 y 1898, los supervivientes manzanareños, Antonio Fernández-Pacheco Márquez, de 88 años y Pascual Romero Plana, de 86, durante su permanencia de cuatro años en la perla de las Antillas, Cuba. Y ambos, aún viven en Manzanares y pueden contarlo.
Los dos conservan en toda su integridad las facultades mentales y recuerdan muchos hechos de su estancia en ultramar. Don Antonio, que fue cabo de la Plana Mayor del Regimiento de Cazadores de Tarifa núm. 5, recuerda perfectamente al soldado español que, extraviado en la manigua, se enfrentó con el cabecilla Maceo y le dio muerte, heroicidad que siempre guardó en el anonimato por temor a que su hazaña hubiera merecido castigo. D. Antonio, fue testigo de la heroicidad de Eloy Gonzalo, por la que se le concedió la Cruz de Santiago.
Estatua de Eloy Gonzalo, el héroe de Cascorro, en el Rastro madrileño. |
Peluquero y practicante, D. Antonio Fdez-Pacheco, aprendió perfectamente las artes de la medicación herbolaria de los guajiros y que en el transcurso de su vida, ha sabido explotar como base de economía, hasta hace poco tiempo. Tiene concedidas tres Cruces de Guerra al mérito militar.
Don Pascual Romero Plana, marchó a Cuba con sus bisoños veinte años, como ordenanza del oficial D. Gonzalo Léon Lores y asistió a los más importantes hechos de armas, como los de Cavite, Cienfuegos, Matanzas, Puerto Príncipe, Rostrogordo y Pinar del Río, donde murió Maceo y otras muchas plazas que recuerda sin dudar detalle alguno. Fue un excelente tirador y como tal, muy estimado. Nunca sufrió herida alguno, tan solo en una ocasión, nos cuenta, una bala le atravesó el sombrero y le chamuscó el pelo. Gozó de gran influencia ante los mandos y lució en su pecho cuatro Cruces de Guerra.
Ambos octogenarios, esperan muy entusiasmados el primer subsidio de los supervivientes de Cuba, que les será entregado en este mes de Diciembre, precisamente.
El estado de salud de ambos, a día de hoy, es bastante aceptable.
Excelente material histórico, gran remembranza de tantos héroes anónimos, que de no ser por la labor tan denodada de la pluma mágica de Don Melchor de seguro no llenaría de conocimientos a las nuevas generaciones que solo perfilan por un futuro y dejan de lado la maravillosa historia, de muchos seres humanos que con sangre y coraje forjaron o por lo menos intentaron dejar un futuro mejor, dejando cuerpo y vida por la patria.
ResponderEliminarNunca mejor dicho, Jorge, que así se escribe la Historia. Si, es cierto que cuanto más conozcamos nuestra historia particular y general, mejor podremos encarar el futuro pero ya sabes, vivimos un mundo convulso y problemático y la mayoría de los seres humanos, van a lo práctico, al día a día, a tratar de 'sobrevivir' ... Así, queda poco tiempo para estudiar el pasado pero hay que intentarlo. Siempre se podrá echar una ojeadita hacia atrás y aprender muchas cosas que pueden sernos de utilidad.
ResponderEliminarMuchas gracias por el comentario.
Agradezco, a Manuel Díaz-Pines, que desempolve estas historias de la historia. Me gusta saber cómo fueron nuestros paisanos, de su valor en las contiendas de hace mas de cien años y que si no fuera por los personas (que como tu padre, Manuel ,) se interesaron en investigar, quedarían en el anonimato.
ResponderEliminarMuchas gracias, Joaqui, por tu comentario. La historia se cuenta y se escribe pero es más importante esto último para cuando no existan almas que la cuenten. Aquí queda escrito para quien esté interesad@ en conocerlo. Un abrazo. Gracias de nuevo.
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