A través del correo electrónico, he recibido unos 'PDF's' con viejos recuerdos de la Revista manzanareña SIEMBRA, a la que todos tenemos gran aprecio porque, sin duda, desde su fundación, es un símbolo para los manzanareñ@s. Aprovecho esta oportunidad para enviarles mi aliento, el apoyo que sea capaz de transmitirles, para que sigan en su afán de no dejar desaparecer la publicación, a pesar de las dificultades de todo tipo que existen - que creo conocer - y que conocen los manzanareños. ¡Gracias, a todo el equipo, por vuestro trabajo y capacidad de sacrificio!.
Nuestro paisano Antonio Quevedo Muñoz, guarda como un tesoro todos y cada uno de los números de la revista y desde la ausencia, intuyo que se refugia en la nostalgia que SIEMBRA le proporciona y lee, repasa y sueña con su pueblo a través de esas páginas. ¡En esta intuición mía, veo lo que SIEMBRA puede proporcionar a los emigrantes y de hecho, así lleva haciéndolo tantos y tantos años, en cumplimiento de sus objetivos!.
De él he recibido estos artículos de Melchor Díaz-Pinés, que publico en entradas de este blog.
¡Muchas gracias, Antonio, seguimos en contacto, como siempre!.
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