Con lo ya repasado
en precedentes relatos- comienza D. Cosme el recorrido de este- quedó compilado
lo más importante que aconteció en el Manzanares del Siglo XVII, en cuyo cuarto
final, como acabamos de recordar, se vivió uno de los momentos más difíciles
que este pueblo nuestro conoció en toda su ya larga historia….y, aunque solo
fuera por eso, sigue Don Cosme, es lógico suponer que las cosas nos tenían que
ir mejor en la centuria que comenzaría enseguida…y, ciertamente, que así fue..
De hecho, las cosas cotidianas de la villa, y su vitalidad, habían empezado a
reponerse de aquella horrible década trágica ya en los 4 últimos años del
XVII…y eso se prolongó en los primeros del nuevo Siglo que entraba, que también
tuvo problemas y cosas perniciosas, como algunas epidemias y plagas, que
afectaron a muchos paisanos y a sus tierras, pero que nunca alcanzaron los
tintes trágicos de aquella década terrible... En fin, desde ahora, y en
adelante, iremos considerando en las sucesivas charlas que mantendré con usted,
querido cronista, todos esos avatares... Para dar título al relato que ahora
empieza -continua D. Cosme- en el que pretendo solo sumarizar, a grandes
rasgos, y sin más pretensiones que su cita, los que, a mi juicio, fueron
principales aconteceres y sucedidos del Siglo XVIII en Manzanares, elegí los
términos Transición e Ilustración; por que se ajustan muy bien a lo que sucedió
en Manzanares, y también en el Mundo, con muchas cosas en esa centuria…. Fue un
siglo de transición, sigue D. Cosme, por cuanto que, en su segunda mitad, la
villa de Manzanares, y el Mundo, cambiaron de edad y época, pasando de la Edad
Moderna a la Contemporanea, allá por los años de la Revolución Francesa de
1789,… y, eso, implicó un gran cambió en las concepciones y en los hábitos de
las relaciones humanas, que se modificaron muy sustancialmente en su:
ordenamiento social, político y jurídico...El individuo humano, sobre todo en
el mundo europeo más desarrollado, comenzó por primera vez a contar, aunque
solo fuera de manera teórica, en el desarrollo de su destino y proyección
personal, dentro de las sociedades y grupos donde viviera..
Pero esa centuria también mereció en la historia de la humanidad el título de
“ilustrada”, y es que, el siglo XVIII –continua D. Cosme- fue conocido como
Siglo de las Luces, aludiendo con ello a que los aconteceres políticos,
sociales y culturales de aquellos tiempos, se basaron en un movimiento
cultural, el “enciclopedismo”, que proclamaba el predominio de la razón humana,
para el desarrollo de las artes, las ciencias y el propio devenir
político-social,... en detrimento del concepto vigente hasta entonces, que
otorgaba ese predominio a la fe religiosa y a las tradiciones atemporales…De
esa manera, la estructura socio-politica imperante durante la Edad Moderna…de
“señores” y “vasallos”,… se vio fuertemente cuestionada por el desarrollo de
ese pensamiento –dice Don Cosme-… y se desmoronó, definitivamente, con la
Revolución Francesa de 1789, basada en esa bonita trilogía onírica de:
“Libertad”, “Igualdad y “Fraternidad”… que si bien, hoy día, esta lejos de
haberse conseguido por la humanidad, es cierto que fue el origen de la
conceptualización teórica y funcional de todas las sociedades del mundo
occidental desarrollado, desde ese momento…ya fuesen de corte dictatorial
(Absolutismo) o participativo (Liberalismo)....Lo cierto fue que, en base a
esta nueva concepción, la civilización europea occidental afianzó su predominio
en el mundo, y extendió su influencia por todo el orbe, lo que dio inicio a la
Revolución industrial y al despegue económico de las sociedades Europeas….
Mi querido amigo, sigue Don Cosme-… pero aquí no hemos venido a hablar del
mundo, sino de Manzanares… Es verdad que: “lo que pasa en el mundo nos influye,
pero es importante que todo el mundo recuerde, que lo que sucede en Manzanares,
muchas veces termina influyendo en el mundo”!!.. apostilla, orgulloso y
sarcástico, Don Cosme… Así pues, vamos a ello…. ¿que ocurrió de importante en
Manzanares durante el Siglo ilustrado?...¿en que se tradujeron todos esos
cambios en nuestra villa y en nuestras gentes?....¿que aportaron las gentes de
Manzanares a ese “siglo de las luces”...
Pues, vamos a ello, mi querido cronista,… y, aquí, en este diserto, solamente
le relataré de manera sumaria y concreta los principales aconteceres durante
ese siglo en nuestro pueblo, para ir desgranándole, en sucesivas crónicas,
curiosidades específicas de cada uno de esos acontecimientos…Sin duda, algo
habrá de quedarse en el tintero, pero, desde luego, no lo más importante, ni
tampoco lo más trascendente, que fue mucho y bastante, como pronto conocerán
usted y sus lectores, apostilla Don Cosme…
Lo primero a comentar –prosigue D. Cosme- es que, de este siglo hemos conocido
muchísimos más datos demográficos y económicos de Manzanares que en tiempos
precedentes, por los varios censos que los Borbones mandaron realizar en el
Reino de España durante esa centuria (Censos de: Larruga, de Aranda, de Floridablanca;
Catastro de la Ensenada y Cuestionario del Cardenal Lorenzana, como más
importantes).…y, de esos censos, hemos conocido también muchas referencias
concretas de las gentes de los diferentes gremios profesionales de la villa,…
de sus costumbres y actividades, de sus finanzas y de sus interrelaciones con
las autoridades locales de la Encomienda, del Concejo y del Reino de España…La
información obtenida de estos censos, nos permite, hoy, conocer bastante bien
la evolución de las familias y haciendas más importantes de Manzanares durante
esa centuria.. destacando entre todas ellas, por su entidad en aquel tiempo,
las referencias a la “Casa del Mayorazgo”, propiedad de la familia Quesada.
La Encomienda de Manzanares en el Siglo XVIII, con el Castillo e inmuebles
anejos, continua D. Cosme, también sufre en aquel tiempo, un proceso
transicional, quedando a cargo directo durante toda la centuria, de sucesivos
infantes de la familia real borbónica, una vez que las Ordenes militares, entre
ellas la Calatraveña, pierden influencia, a favor del centralismo estatal que
promueven los Borbones. De todo esto, y de las vicisitudes más interesante
habidas al respecto, comentaremos también en relatos que llegarán….
Para Manzanares, comenta Don Cosme, fue muy importante que el Nuevo Camino Real
de Andalucía, acondicionado y definido en la segunda mitad del Siglo XVIII,
pasase por nuestra población, atravesándola de norte a sur, cuyo tramo quedo
abierto en 1761…. Este hecho conllevó, por si mismo, un aumento del número de habitantes,
con la correspondiente expansión del casco urbano, en dirección Norte, a ambos
lados del Camino Real, con la construcción de nuevas de las mejores casas
solariegas que este pueblo tiene hoy día…. Hacia el Sur, no se pudo crecer por
la barrera natural del Río Azuer y su Vega, aunque toda esa zona meridional se
acondicionó para conseguir las mejores condiciones al para el nuevo Camino….En
ese sentido, en 1766, se construyen, para vadear el rio Azuer y canalizarlo por
los márgenes y el interior de la villa, dos de los puentes más clásicos de
Manzanares, el “Puente de los Pobres” y el “Calicanto”… De ambos puentes,
historia viva de Manzanares.. de cómo se construyeron, y de algunas
curiosidades más acerca de ellos, comentaremos muchas cosas en relatos
sucesivos… Y como hablamos del Azuer, decirle ahora, querido cronista, que
Manzanares y sus paisanos siguieron siendo pioneros e innovadores en las
técnicas de aprovechamiento de las aguas del rio,… Manzanares, y sus gentes,
quedaban, una vez más, y a este respecto de las aguas del Azuer, a la cabeza de
la “ilustración” manchega, en ese siglo ilustrado, tanto para el riego, como
para la industria de los molinos de agua, como veremos, más extensamente
desarrollado en relatos específicos acerca del Rio Azuer...
El marcado
aumento de transeúntes por el citado Camino Real de Andalucia, prosigue D.
Cosme, motivó también entre cosas, durante esa centuria del XVIII, la creación
de numerosas fondas y posadas en nuestro pueblo, que fueron muy afamadas en
todo el Reino, y que acogieron en Manzanares, alguna que otra noche, a
personajes muy relevantes de la política o de la cultura, tanto españoles como
extranjeros…
También en los inmuebles más importantes de la villa, continua D. Cosme, se
vivieron tiempos de transición y de cambios durante el Siglo XVIII, haciendo
válido el título que hemos dado al relato. En la Catedral de Manzanares, los
paisanos de entonces asistieron a la total terminación de su bellísima y
esbelta Torre, en fecha no bien determinada de esa centuria…así como, también,
al acabado de algunas de sus Capillas laterales, y a la colocación, en 1724, de
un nuevo retablo (el de San Raimundo), en la pared epistolar del Crucero,
episodio, este último, que motivó la llegada a Manzanares de numerosas autoridades
civiles y eclesiásticas que, para su inauguración, fueron invitados en nuestra
villa, por D. Iñigo de la Cruz Manrique de Lara y Ramírez de Arellano, XI Conde
de Aguilar de Inestrillas y Señor de los Cameros..y Comendador de Manzanares en
aquel momento. Hablaremos por aquí, Dice D. Cosme, de las curiosidades que dio
lugar este evento, acerca, sobre todo, de los festejos y actos religiosos que
lo acompañaron.. En aquellos tiempos es, muy probablemente, cuando se
construyen los “balconcillos” de la fachada sur de nuestra Catedral, para que
las autoridades e invitados pudieran contemplar los espectáculos teatrales y
taurinos, llevados a cabo en la Plaza, y a los que era muy aficionado nuestro
Comendador, D. Iñigo de la Cruz Manrique de Lara. Conde de Aguilar.
En 1785, se
construyó en la Parroquial de Manzanares una Sacristía pequeña;… y, diez años
después, todavía en esa centuria, en el año de 1795, otra Sacristía grande…..
La transición que caracterizó a esta centuria en Manzanares, se reflejó
también, sigue D. Cosme, en grandes obras de rehabilitación y transformación en
otros inmuebles de naturaleza eclesial…. las Ermitas más significadas de
nuestra villa..Tales fueron los casos de: San Antón, Santa Quiteria y San
Gregorio Ostiense… cambiado, incluso, de advocación estas dos últimos,… y,
consecuentemente, el nombre de sus cofradias, a los de Virgen de La Paz y Santo
Sepulcro, respectivamente…
También, tendremos ocasión de conocer la
reconstrucción, en la Alameda de Siles, de la Ermita de la Magdalena, en el
contexto de la “urbanización”, Plaza de Toros incluida, que se llevó allí a
cabo en la época del ya anteriormente mencionado, Conde de Aguilar y “Señor de
los Cameros”. Y ya que volvemos a hablar de él, decir que como un personaje
propio de ese Siglo Ilustrado que fue el XVIII, tuvo claro que los festejos
eran fiel exponente de la vitalidad, esplendor y progreso de los pueblos.. y
uno de los motivos por los que un dirigente es más reconocido….a él se debe la
constitución de las ferias y fiestas de Manzanares de Agosto”…“La historia
sitúa el año 1723, como la primera de estas fiestas que se celebraban en
nuestra Plaza Mayor, coincidiendo con una época de prosperidad y desarrollo de
Manzanares y de su población, a causa de su pujante viticultura y una importante
industria de ferretería para transporte de esos productos por carretera”…
La prensa escrita, mi querido cronista, y como usted bien sabe, comienza a ser
noticia, y a dar noticias, allá por la segunda mitad del Siglo XVIII, que es
cuando comenzamos a conocer las primeras referencias de prensa escrita acerca
de Manzanares...Desde entonces, y en adelante, podremos ir conociendo mejor la
historia real de las cosas del Mundo y, por supuesto, de Manzanares.. Algunas
curiosidades comentaremos también acerca de esas primeras noticias de nuestro
pueblo en el Siglo XVIII…
Termine ud, aquí el relato, querido cronista, que fue suficiente para dar
contenido a un pequeño sumario de sucedidos importantes del XVIII en
Manzanares, que desarrollaremos más pormenorizadamente en relatos posteriores…y
que sirven para hacer ver la importancia innovadora de Manzanares, en el “siglo
ilustrado”…algo nada extraño para un pueblo acostumbrado a ser “punta de lanza”
desde el comienzo de su historia…
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