“Y es claro y ya
sabido, inicia D. Cosme un nuevo relato… que, habiendo terminado la reconquista
de la península ibérica las fuerzas castellanas, allá por los finales del Siglo
XV, este pueblo de gentes emprendedoras que es Manzanares, al comienzo de la
Edad Moderna y del Siglo de Oro, aprovechó con enorme perspicacia la deriva
natural y lógica del poder, desde el localismo del maestrazgo calatravo, hacía el
que emanaba directamente del Reyno de la recién reconstituida España, para
mostrar a su Rey lealtad incondicional, al extremo de alcanzar por ello el
título de “Leal Villa”,..
“Pero a la vez, y como contrapartida, sigue Don Cosme
su vibrante diserto, nuestro Concejo, impulsado por el paisanaje manzagato,
supo maniobrar ante las nuevas autoridades para recuperar, por un lado, los
aspectos más democráticos que la antigua legislación calatrava establecía para
la elección por votación directa de los representantes del pueblo y de la
nobleza en el ámbito de la villa…y, de otra parte, el reconocimiento y control
jurisdiccional de los condominios de nuestra rica Encomienda, hasta aquellos
tiempos, dependientes de la villa de Almagro”…. “Ambas cosas juntas, terminaron
de dibujar un escenario manzagato muy atractivo para los proyectos personales y
de desarrollo de los aldeanos y para muchas otras gentes que conocían la
riqueza potencial de nuestra Encomienda,…y, todo ello, se concretó finalmente
en ese gran crecimiento poblacional y urbano que vivió la Villa de Manzanares
en el Siglo XVI”….”Ante este atrayente panorama, llegaron hasta aquí, y se
aposentaron en nuestra “Leal Villa”, familias forasteras de alta cuna y rango,
venidas de múltiples regiones del Reyno, que al correr del tiempo, habrían de
formar parte de nuestro vecindario y de nuestra historia..y es así, que en las
Relaciones de Felipe II de 1579, nuestros relatores dijeron esto acerca de los
hidalgos de nuestro pueblo, entre los que se encontraban algunos de ellos:..
“los vecinos de esta villa son la mayor parte labradores y había doce casas de
hijosdalgo a los cuales se les guarda los privilegios que conforme a derecho y
leyes de estos reinos han y deben gozar los tales hijosdalgo”…
“Y estos hidalgos forasteros, supieron integrarse muy bien, y complementaron,
sin estridencias ni excesivos conflictos de hacienda o competencias, a la
preexistente hidalguía calatrava local… en una especie de mestizaje de
nobleza… sabiendo ambos grupos nobiliarios -forastero y autóctono-, establecer
un entendimiento razonablemente bueno para conformar, a lo largo del Siglo XVI,
la nueva nobleza oligárquica de Manzanares, que sustentó financieramente el
desarrollo de la Encomienda y el crecimiento de la villa… a la vez que fue
dejando su sello en la construcción de los primeros palacetes que tuvo
Manzanares, muchos de los cuales han pervivido a los tiempos, y aun se pueden
contemplar, tal como usted ha tenido ocasión de ver y admirar a lo largo de los
ya numerosos paseos que nos hemos dado por este pueblo”…. “Esos paseos, dieron
pábulo y espacio a la descripción de lo mejor del casco antiguo de Manzanares,
dando pie también a comentarios sobre los inmuebles más destacados que este
pueblo tuvo y tiene, y de quienes los habitaron …pero, ahora, como hemos dicho,
vamos a centrarnos en las particularidades de algunos de los primeros Palacetes
y mansiones, aquellos que nacieron al albur del gran desarrollo sociológico y
urbano vivido en nuestra villa durante el Siglo XVI”, y que fueron erigidos,
sobre todo, en la que era su arteria principal, la Calle del Carmen, y
recordaremos también algunas cosas relevantes de quienes fueron sus primeros y
nobles inquilinos”…. “Y, para empezar, tenemos bien cerquita, en espacio y
tiempo, el primero de estos palacetes de que hablarle quiero…, acabamos de
hacerlo en el reciente relato acerca del paso de Santa Teresa por nuestro
pueblo de Manzanares.., me refiero, claro está, a la casa donde la Santa se
instaló para pernoctar esa noche del 14 de febrero de 1575,…
la “Casa de los
Merinos”, sin duda, un edificio muy especial de este pueblo….con una gran
historia detrás de sus paredes”… “Este palacete solariego, tal como se le puede
ver hoy en día, aunque no tiene una datación clara, seguramente se comenzó a
construir en las primeras décadas del Siglo XVI, pero las características de
las bodegas de su sótano, indican que sus cimientos están aquí desde las más
antiguos tiempos del lugar, allá por el siglo XIII y, por tanto, allí hubo
edificaciones previas…. y el primer inquilino de esa casa en el Siglo de Oro,
fue un hidalgo manzagato, Don Miguel Merino Morales, justamente el anfitrión de
la Santa Teresa de Jesús en Manzanares, pero también el impulsor y mentor
financiero de esa primera y preciosa Capilla de la Transfiguración, del lado
del evangelio de la Catedral de Manzanares”….”Y, a más abundancia, este
Palacete, se conserva en su estructura básica, muy parecido a como quedó
terminado a mitad de ese Siglo XVI,… un Palacio Solariego típicamente manchego,
con un patio central columnado, que, a su izquierda , tiene adosado un enorme
corral con distintos aposentos para almacenamiento de los utensilios y
productos agrícolas”… “En sus antiquísimos sótanos, tuvo y tiene una magnífica
bodega, y en sus dos plantas superiores las zonas vivideras, adecuándose la
mansión a las necesidades de la casa, que tuvo la agricultura como principal
actividad” “El otro gran Palacio de esta Calle del Carmen, construido en el
siglo XVI, sigue comentando Don Cosme, es el del Marquesado de Salinas, insigne
y noble apellido y linaje, de cuya familia, en este caso forastera, el primer
miembro que recaló en Manzanares fue Don Pero Hernández de Salinas que, entre
1562 y 1568, ejerció el cargo de Alcalde y Mayordomo del Comendador de la villa,
Marqués de Priego,.. y que, quizá por eso, hizo construir su Palacete de la
Calle del Carmen, en las inmediaciones del Castillo, entre este y el primer
Hospital que tuvo nuestro pueblo…Luego, su hijo, Juan Bautista de Salinas, fue
Regidor Perpetuo de Manzanares, y casó con Mencía Ortiz, asentándose ya el
Marquesado de Salinas en nuestra villa, definitivamente”….. La Casa-Palacio del
Marquesado de Salinas fue, sin duda, la más señorial que tuvo el Manzanares de
la época, y poco ha cambiado desde entonces en su aspecto externo, donde tiene
una larga fachada, con un sencillo pórtico de piedra,… y, sobre su balcón
principal, también en piedra, los escudos y blasones de los linajes Chacón y
Salinas, con otro escudo de los Salinas, al final, enseñoreando su esquina”….
“Su interior, con patios manchegos columnados y sobrias estancias castellanas,
ricas en cuadros, tapices y otros ornamentos de valor, complementan ese
magnífica mansión, concluye D. Cosme”.
“ Otros muchos palacetes y mansiones solariegas, se construyeron en Manzanares
en ese Siglo XVI, y no cabría su descripción en este relato, pero huelga decir
que la imagen de ese casco antiguo, que dos siglos antes había quedado cercado
por la efímera muralla que tuvo Manzanares, a esas fechas, había cambiado
muchísimo, con las nuevas mansiones y las remodelaciones de algunas de las
preexistentes, en todas las calles de su interior … como, por ejemplo, la “Casa
del Santo”, la única casa que quedó en pie de las que conformaban el contorno
de la muralla original, aunque entonces fuese bastante distinta de cómo es
ahora”… “Por aquel tiempo, en la segunda mitad del Siglo XVI, y en el entorno
del Castillo, el Comendador Marqués de Priego, hizo construir otro inmueble
histórico, del que también hemos hablado en otros relatos, la “Casa de la
Tercia” y, también por entonces, se construyó otra de las mansiones más
significadas de Manzanares, la “Casa del Mayorazgo”,…situada en la calle Ancha,
un poco por fuera de donde estaba la muralla”... “Esta magnífica casa solariega
manchega, se constituyó en la vivienda principal de otros nobles con larga
historia en Manzanares, la familia Quesada, propietaria del Mayorazgo de
Manzanares… Parece que el primer ascendente de esta saga llegó a Manzanares
antes, a finales del siglo XV, y respondía como Don Bernardo de Quesada, un
hombre de armas que vino con el séquito del comendador frey don Alonso Dávila
cuando éste tomo posesión de la encomienda y del castillo, en el año
1484"…. "A lo largo del Siglo XVI, descendientes suyos fueron muy
importantes en la villa, por ej: Don Francisco de Quesada Fernández, nacido en
Manzanares y casado con otra manzagata, Francisca Rodríguez, que fueron los
primeros inquilinos de la Casa del Mayorazgo....Su hijo, Francisco Quesada
Rodríguez, bachiller en leyes y familiar del Santo Oficio, que estuvo casado
con doña María González de Hinojedo, a quien se atribuye la fundación, en 1589,
de la capilla de San Ildefonso del templo parroquial. Este mismo Francisco, fue
uno de los que redactó, en 1579, junto con otros naturales de la villa,…
(bachiller Juan Sánchez, alcalde, Juan Bautista Salinas, regidor, licenciado
Márquez, bachiller Juan Sánchez de Manzanares, Pedro de Porras, Diego Ordóñez
de Valdelomar, Juan Bautista de Salinas, Bernardino Navarro, Felipe Garcés,
Roque Hernández, Juan Martín Calero, Hernando Núñez de la Cuesta, Juan López,
Rodrigo Merino, Alonso Márquez, Miguel Díaz y Alonso Hernández Navarro), las
respuestas al cuestionario planteado en las Relaciones de Felipe II… Por
último, cabe mencionar de esta saga, a los hermanos Blas y Bernardo de Quesada,
que, al final del Siglo XVI, junto a otro noble de apellido Naranjo, casado con
Francisca de Quesada, dejaron en Manzanares una huella indeleble, al fundar y
mandar construir el convento de Religiosas Franciscanas de Clausura, inaugurado
el 26 de abril de 1592.. que, al parecer, hicieron para complacer a sus hijas ,
que deseaban profesar y al mismo tiempo permanecer cerca de sus familias”.
“Y aunque algún nombre y casa de relevancia, necesariamente han de quedar fuera
de este escrito, y no por su valor, sino por el espacio,...hay un noble
manzagato de este Siglo XVI, al que quiero mencionar, especialmente, para
finalizar el relato, dice Don Cosme,…y me refiero, querido reportero, a Don
Sebastían Gómez de Rabadan, que, sin duda, por toda su trayectoria vital, es el
más grande símbolo humano de ese Manzanares del Siglo de Oro”… “Como muchos
otros paisanos, su manera de ser y su emprendimiento le llevó a amasar una gran
fortuna…. Hidalgo y rico hacendado, era poseedor de uno de los primeros molinos
del Rio Azuer, y tuvo su vivienda al final de la calle Ancha, frente a la
Ermita de Santa Quiteria”… “Su mansión, no era un palacete al uso, era un casa
rústica, donde este filántropo manzagato daba acogida todos los días a
cualquiera que solicitase ayuda…. De un sólido y acendrado cristianismo,
compartió su enorme fortuna con todo paisano que estuviera necesitado… Se
encargó de financiar las obras del magnífico frontispicio de nuestra Catedral,
y también de construcciones y reformas en la ermita de Santa Quiteria y otros
templos locales”… “Al final de sus días, arruinado, y con todos sus bienes
donados o repartidos, tuvo que recurrir a la mendicidad para sobrevivir,
convirtiendo así su vida en una autentica metáfora de la existencia humana”….
“Este insigne paisano, es recordado para la posteridad, encima de la puerta de
la que fue su casa, por una representación de su figura en una imagen de
paseante con capa, sombrero y báculo, que ha quedado para siempre como uno más
de los iconos y emblemas de este eterno Manzanares para los siglos venideros…
No hay comentarios:
Publicar un comentario