Y los paseantes,
enfilan la calle del Pósito hacia la calle Empedrada, para continuar conociendo
la historia y la pujanza vital de Manzanares, aprovechando la sucesión de
edificios históricos y escudos heráldicos que a su paso, pasen…
“Y llegan a la
calle Empedrada, y los que allí llegan tienen, allí mismo, en esa esquina con
Pósito, el primer referente histórico que han de considerar… es, como ustedes
ya conocen, esa casa esquinera, desde cuyos balcones leyó Don Antonio Cánovas
del Castillo, en una calurosa tarde de primeros de Julio de 1854, un Manifiesto
que habría de dar lugar a un cambio de tendencia política en toda España…. y eso, puso a Manzanares en la historia española, como punto y origen de ese
cambio, que quizá no habría sido posible, si este pueblo no hubiera acogido a
esos militares rebeldes, encabezados por el General O’Dónnell, y le
facilitasen, con riesgo de si mismo, la proclamación de sus intenciones”…
“Y,
al reportero, le llama la atención la “ausencia de señales en la casa que
hablen del susodicho episodio”… “y así se lo comenta a D. Cosme, añadiéndole
que, a su juicio, sería conveniente que al menos una placa, situada en su
fachada, bajo el balcón desde donde se leyó esa histórica proclama, testificase
el episodio para la posteridad”…. “Y, es entonces, cuando D. Cosme le dice que,
pensando en ello, las autoridades locales andan con la idea de darle el nombre
de “Manifiesto” a toda esta calle”…"con lo cual ya tendría esa
"placa" que usted solicita".
“Pero es que, esa esquina, en sus dos lados, nos da también, y sobre todo, una
idea de hacia donde se aboca Manzanares en un futuro próximo, que ya comienza a
ser presente”,…. “y va a dar un giro inesperado a la conversación de los
paseantes y a la propia configuración del relato que ustedes tendrán a la
consideración de su lectura”… “Hasta ahora hemos visto y hablado, en el
recorrido hecho por el casco histórico de este pueblo, de casas nobles, casas
solariegas, emblemas y escudos, monasterios, fraguas, mataderos, hornos de
pan”… “En fin, cosas de otros tiempos, grandes tiempos, sin duda, pero
distintos de los que vienen”….”Y es que estamos entrado en una calle de este
pueblo llamada a ser clave en su desarrollo, de hecho ya lo esta siendo”…. “Es,
sin duda, una calle abierta al futuro de este Siglo que comienza”… “En ella
veremos todavía edificios y símbolos del pasado, pero, ante todo, veremos que
esta plagada de establecimientos comerciales y de industrias que anuncian la
nuevas formas de vida de este incipiente Siglo XX”…
“El reportero, que llega de
Madrid, comenta a D. Cosme, que esta calle Empedrada, que él ya ha transitado
varías veces desde que llegó a Manzanares, es, salvando distancias y
magnitudes, la “Gran Vía de Manzanares”… “Y, lo es, por ser la calle más
comercial de este pueblo”… “pero es que, ese término, “comercial”, nos habla,
ya sin más, de otra vida y de otro nuevo pueblo… por que, hasta ahora… era,
eso… un pueblo… con gran historia, es verdad, pero dedicado, casi en
exclusiva, a la agricultura y sus derivaciones”… “Y no solo esta calle Empedrada es, y será, muy importante por ese carácter comercial para este
pueblo”.. “es que, además, es la vía más directa para unir el glorioso pasado
de Manzanares con su prometedor futuro”…
“Y decimos esto -y es D. Cosme quien
lo dice- porque usted y yo hemos conocido y transitado la historia de los dos
primeros siglos de Manzanares, cuando este poblado desarrolló lo fundamental de
su “vida” en torno al Castillo y sus aledaños”… “También hemos visto, como el
crecimiento expansivo e imparable de ese incipiente poblado, impulsado por sus
gentes emprendedoras, “derrumbó” sus propios muros para crecer imparablemente”…
“La imponente Iglesia Parroquial, construida en el Siglo XVI, al final de la
calle del Carmen, al lado norte de la abierta Plaza que allí se conformó al
mismo tiempo, motivó el traslado hacia ese entorno, de las moradas, las
relaciones y los núcleos cotidianos de la vida de muchas de las gentes
importantes del Lugar”,… “El mercado y las fiestas populares, encontraron en
esa Plaza su mejor ubicación natural y, con ello, la concretaron como el núcleo
vital de Manzanares hasta nuestros tiempos”… “Pero es que los tiempos cambian y
modelan las vidas y los pueblos, me dice D. Cosme”…”y solo hace medio siglo,
aquí, en Manzanares, como en todo el mundo, llegó el ferrocarril”…
“y, con él,
el comienzo de su particular revolución industrial”… y, también con él, y con
ella, el cambio de muchos de los entornos de este pueblo”… “los cinco puentes”,
la Estación y su Paseo, la Vereda, las grandes bodegas vitivinícolas y las
industrias que acompañan, necesariamente, su actividad, el Gran Teatro y su
Plaza, nacieron o se desarrollaron a su rebufo, expandiendo y transformando la
configuración del pueblo en su parte norte, que cambió por completo, y llevó a
gran parte de manzanareños a morar o a trabajar a esos lugares “norteños” de la
ciudad”…
“Y claro, esta calle Empedrada, fue la vía más rápida y natural de
enlace entre ese pasado pujante y este inmenso futuro industrial que tiene
Manzanares”…. “La Plaza Mayor, punto vital histórico de la villa, quedará, para
siempre, unida con esa novísima Plaza del Gran Teatro (nuevo núcleo vital del
naciente Manzanares industrial) de manera casi directa, a través de esta calle
Empedrada que, acabando en la Plazuela del Rosado, se continua, brevemente ,
con la pequeña vuelta del comienzo de la calle Morago, hasta la Plazuela de los
Paradores, para enlazar ahí con la calle Toledo, que, si en aquellos tiempos
pasados fue importante, por ser parte de las cañadas reales y, por ello, paso
obligado y parada transitoria del ganado trashumante y de su “acompañamiento”
humano, reportando vida, alimentos y tributos al poblado”,… “hoy ésta calle
Toledo, está también transformándose en una nueva gran arteria vital y
comercial de ese Manzanares que se abre al futuro, al dar espacio, cabida y
morada a muchos manzanareños, y a nuevos establecimientos comerciales que allí
se están trasladando, al albur del desarrollo y crecimiento de las industrias
bodegueras y vitivinícolas de la antigua vereda y del Paseo de la Estación”…. “Nuevos
espacios, de un nuevo pueblo”…
“Y todo este relato, surgió al principio de este mismo relato”…”y vino a
cuento de esa esquina de Pósito con Empedrada, porque allí, además de esa casa
del Manifiesto, en ambos esquinazos, Manzanares tiene dos florecientes
establecimientos industriales, que han de marcar estos nuevos tiempos…”…. “A la
izquierda, la “Casa Noblejas”, una tienda de tejidos, que marca tendencias
nuevas en la comercialización de las telas y de los trajes”…y, a la derecha, en
los bajos de la Casa del Manifiesto”, una magnífica confitería y repostería, la
de Don Alberto Mazarro, montada con todo el confort, la calidad en sus
productos y el lujo necesario y debido al nuevo tiempo, que en nada tiene que
envidiar -y este reportero da fe de eso-, a los mejores establecimientos de
reposteria que proliferan en la corte”…. “Existe en ella un inmenso y variado
surtido en toda clase de golosinas, capaces de endulzar una vida por muy amarga
que esté”…"y allí que nos metemos D. Cosme y yo para endulzar el final de
este relato, que concluye aquí”….
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