Acabamos de conocer, querido cronista, me
dice D. Cosme, los oficios de más lustre en Manzanares, allá por el 1752, tal
como quedaron reflejados en el Catastro de Ensenada …y, ahora, hablaremos de
otros no menos nobles: labradores, artesanos, comerciantes, pastores.. pero
que, desde luego, resultaban menos lustrosos en cuanto a las rentas que
aportaban a los que los tenían por oficio en aquel Siglo llamado ilustrado..Y
de esos oficios, y sus rentabilidades, que también quedaron escritos en el
citado Catastro, será de lo que tratemos en esta crónica; lo que nos ayudará a
conocer mejor cómo era aquel Manzanares… sus gentes, y los trabajos a que
dedicaban su día a día. Conoceremos curiosidades de esas faenas, y sus lectores
comprobarán que en todo tiempo ”cocieron habas”..y que siempre hubo gentes con
más “posibles” que otras... Y vamos sin dilación, dice D. Cosme,. a todo lo que
constituirá la crónica...
Comenzaremos, continua D. Cosme, citando lo que se dice , literalmente, en el
catastro sobre los trabajadores más humildes del pueblo, empezando por los que
nada tenían…y, de ellos, hablarón nuestros paisanos de esta manera:...
"…en la población habrá como 300 pobres de solemnidad que libran el
sustento diario en la caridad del prójimo”. Como ve ud , dice D. Cosme, una
cifra significativa de pobres, para los 6.000 habitantes que, más o menos,
tenía Manzanares; quizá los paisanos que dieron texto a nuestra parte del
Catastro, “inflaron” esas cifras, en una alarde de solidaridad local, para
proteger a sus más pobres frente al fisco, remata su comentario D. Cosme, con
cierta ironía.…
También, sigue D: Cosme, hablan en el catastro acerca de los jornaleros de la
villa, así: “…en el pueblo habrá, sobre poco más o menos, 500 jornaleros que
por las lluvias vacantes y malos temporales solo se ocuparan al año 100 días, y
que su jornal por día son tres reales y medio, con costa de mantenimiento, y
sin él 2 reales”… En este punto, prosigue D. Cosme, se aprecia igual intención
protectora de los informantes hacía sus paisanos más humildes, …pues,
seguramente, la estimada ocupación de 100 días por año, era menor que la real,
de tal modo que nuestros jornaleros verían algo menos mitigados sus exiguos
salarios…Y esto, se deduce de lo que comentaron acerca de los labradores por
cuenta propia, para quienes estimaron más días de trabajo por año, al decir
esto:… “diariamente se considera a cada individuo trabajando..sin impedimento
de malos temporales ni otras contingencias, por 180 días en cada año, son, a
saber”:…. “A cada labrador de los que trabajan por sí en su propia hacienda
cuatro reales y medio por día con costa de mantenimiento y sin él tres”. “A los
sirvientes en la labor con título de mayorales a cada uno por día cinco reales
con costa de mantenimiento, y sin él tres y medio”…. “A los empleados de dicho
servicio de labor con título de ayudadores a cada uno por día cuatro reales y
medio con costa de mantenimiento, y sin él tres”... “A los ocupados en dicho
tráfico de labor con el título de zagales a cada uno por día tres reales y
medio con costa de mantenimiento y sin él dos. Y lo mismo a los hijos, hermanos
y sobrinos de dichos labradores que trabajan en sus respectivas haciendas”..
Como verá, dice D. Cosme, aparte la escasez de los salarios, se tipifican las
jerarquías laborales existentes, con nombre y salarios de cada una de ellas..
Tras los oficios de la tierra, sigue D. Cosme, nuestros paisanos citan los del
ganado, con similares jerarquías a los labriegos, y aun más exiguos salarios,
diciendo lo siguiente:..
“A los mayorales sirviente en ganado lanar, reguerío o mular a cada uno por día
tres reales con costa de mantenimiento y sin él dos”...“A los ayudadores
sirvientes en dichos ganados a cada uno por día dos reales y medio con costa de
mantenimiento y sin él un real y medio”… “A los zagales sirvientes en los propios
a cada uno por día dos reales con costa de mantenimiento y sin él uno”…
Después de comentar a todos estos laborantes, sin duda los más genéricos y
humildes de los que se realizaban en la villa -comenta D. Cosme-.. en el
catastro se relacionan, uno a uno, distintos oficios más especializados, donde
quedan reflejados nombres concretos de paisanos nuestros de aquella mitad del
XVIII…Por ejemplo, comentan lo siguiente: “Juan Joseph Rivera, platero, su
jornal por día 5 reales”…
“Pedro Clemente Dueñas, Alphonso Clemente Dueñas mayor y Alphonso Clemente
Dueñas menor, tahoneros de pan blanco, su jornal diario para cada uno 5
reales”... “Sebastián Serna, Francisco Clemente Dueñas, Juan Francisco Rabadán
y Bartolomé Sánchez Elipe, panaderos de pan común. Su jornal por día para cada
uno 3 reales”…
“Juan Joseph López de Daimiel y Alfonso Quijano curtidores. Su jornal diario
para cada uno 6 reales. Y Bernardo Ruiz Quijano oficial en el mismo ejercicio 4
reales por día”.
“Manuel Sánchez-Migallón, chocolatero. Su jornal por día 6 reales. Y Manuel
Sánchez, su hijo, oficial en dicho ejercicio, 4 reales por día”…
“Francisco Rodríguez González, Juan Josep Redondo y Pedro Espinar, molineros de
harina. Su jornal diario de cada uno 4 reales”.
“Juan Martín Buena Mañana, Juan García Gallego y Felipe Gallego, bataneros. Su
jornal por día de cada uno 4 reales”…
“Domingo García de Mora, yesero. Su jornal por día 5 reales”..
“Juan Moreno, barrero. Su jornal por día 5 reales”
“Fernando Diaz Madroñero, Pablo López de Pablo y Alejandro Delgado menor,
tejeros. Su jornal diario de cada uno por día 5 reales”..
“Matias Abad mayor, Matias Abad menor, Francisco Sánchez Villagos y Martín
Sánchez Mascaraque, maestros alarifes. Su jornal diario 6 reales. Y cinco
oficiales del mismo ejercicio (a los que no se nombra) a cada uno 4 reales”…
“Joseph Camacho León, Diego Moreno de la Paz, Julian Sánchez Camacho, Bernardo
Ruiz Alarcón, Francisco Rosado, Damian Rosel y Juan Serna, maestros albéitares
y herradores. Su jornal diario 6 reales. Y a tres oficiales del mismo ejercicio
(que no se nombran). Su jornal de cada uno 4 reales”…
“Joseph Gutierrez Espinosa, Diego Peñuelas, Martín García Salmerón, Thomas
Merino de León, Juan Antonio de Bustos, Francisco García Bolaños y Joseph
Lorenzo, maestros barberos sangradores. Su jornal diario de cada uno 4 reales.
Y a dos oficiales de este ejercicio (que no se nombran) a cada uno por su
jornal 2 reales”…
“Gabriel Sánchez Manzanares, Francisco Guijarro, Miguel Sánchez Manzanares,
Alejandro Caravantes, Pedro Carrascosa, Pedro de Cordoba., Manuel Gómez, Pedro
López de Troya y Berbnabé Sánchez Ajofrín, maestros carreteros. Su jornal de
cada uno 6 reales. Y a dos oficiales de dicho ejercicio (que no se nombran) a
cada uno 4 reales. Y a un aprendiz del mismo (que tampoco se nombra) 2 reales”…
“Andrés Martínez, Joseph Duran, Joseph López Mateos y Agustín de Bernardo
Martín, maestros carpinteros. Su jornal de cada uno 6 reales. Y a un aprendiz
del mismo, (que no se nombra) 2 reales”..
“Manuel Martín de la Orden, maestro sombrerero. Su jornal diario 5 reales”…
“Joseph de Arribas, Francisco Ferrezuelo, Vicente Guerras, maestros cerrajeros.
Su jornal de cada uno 6 reales”..
“Mateo Valero, Juan Antonio Camacho Merino, Manuel Joseph Serrano, Juan Joseph
Abad, Alphonso Camacho Merino, Manuel Arbañil y Manuel de Ledesma, maestros
herreros. Su jornal para cada uno 5 reales. Y a dos oficiales del mismo
ejercicio (que no se nombran) por cada uno 3 reales”..
“Dieciocho maestros sastres (que no se nombran). Sus jornales cada uno por día
6 reales. Y tres oficiales del mismo ejercicio (que no se nombran) por cada uno
3 reales”..
“Once maestros zapateros de nuevo. Su jornal diario para cada uno 6 reales. Y a
diez oficiales de dicho ejercicio a cada uno por su jornal 3 reales. Y a dos
aprendices del mismo.por cada uno real y medio”….“Diecinueve maestros zapateros
de viejo. Su jornal de cada uno 2 reales y medio”… (No se dan nombres de
ninguno).
“Siete tejedores de paño (que no se nombran). Su jornal de cada uno por día 5
reales”.
“Veintidos maestros cardadores. Su jornal para cada uno 4 reales. Y a 5
oficiales del mismo ejercicio a cada uno por día tres reales. (No se dan
nombres de ninguno)..
Manuel Díaz mayor y Manuel Díaz menor, maestros calderos. Su jornal de cada uno
4 reales”…“Manuel Martín, maestro botero. Su jornal 4 reales”...
.“Manuel García Salmerón, esquilador. Su jornal 4 reales”…“Alfonso Sánchez
Garnica, cochero. Su jornal 4 reales”…“Francisco López Blanco y Joseph Rivas,
cortadores de carne. Su jornal de cada uno 5 reales. Y dos ayudantes en este
ministerio (que no se nombrán), a cada uno por día 2 reales”.
Y terminan nuestros paisanos, dice D. Cosme, el relato de oficios comunes en la
villa,, certificando los 180 días de labor por año:.. “Previniéndose a mayor
abundamiento que todos los considerados en el ingreso de esta pregunta han sido
regulados sus respectivos jornales y utilidades por los 180 días útiles en cada
año expresadas en ellas”.
En otras partes del catastro se comenta de industrias muy populares y activas,
esto::
“Cinco tejeras en que se fabrica teja, ladrillo, baldosa y cal…y son propias la
una de Martín Mascaraque, otra de Pablo López de Pablos, otra de Agustín Medina
y las dos restantes de D. Tomás Guerrero, cuya utilidad de cada una anualmente
consideran en 66 reales”… “Un horno en que se fabrican arcaduces, botijas y
otros menudillos, propio de D. Juan Moreno, cuya utilidad anual regulan en los
mismos 66 reales”… “Tres pozos de nieve, el uno en la calle de la Tercia,
propio del Conde de Sevilla la Nueva, cuyo interes anual es considerable en 150
reales. Otro propio de la encomienda de esta villa y el otro de los herederos
de D. Juan de León, que ambos se halla sin uso a causa de no poderse conservar
en ellos la nieve por lo que no rinden utilidad alguna”…“Una caldera para sacar
aguardiente, propia de Juan Antonio Caballero, cuya utilidad anual consideran
en 220 reales”…“Otra caldera en que se fabrica jabón blando, propia de Martín
Joseph Nieto, cuyo interes anualmente regulan en 250 reales de vellón”… “Tres
tahonas de pan blanco, la una propia de Alfonso Clemente Dueñas y la otra del
Conde de Sevilla la Nueva, cuya utilidad de cada una consideran por año 150
reales”….“Dos mesas de trucos, la una propia de Vicente Camacho cuya utilidad
anual estiman en 1.000 reales de vellón y la otra de Isabel Cornejo que su
interés anualmente regulan en 300 reales”…
Por último, los relatores acaban los considerandos del apartado, así:..“Y
últimamente hay en el término de la población diferentes piezas de tierra
empedradas de canto guijarro en que se benefician las mieses, que por ser
crecido su número y de diferentes vecinos no se expresan a la letra, y para
poder puntualizar sus intereses con vista de los memoriales consideran de
utilidad por cada mil varas veinte reales de vellón por año”.
Puede, ahora,
querido plumilla, con todo lo ya escrito, acabar la crónica, pues ya fue
bastante y concorde a lo escrito en el catastro, para hacerse buena idea de
casi todos los oficios y laboreos de la villa de Manzanares de la Mancha a
mitad del Siglo Ilustrado…
No hay comentarios:
Publicar un comentario