¿Damos un paseito por Manzanares?

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Todo cuanto vas a encontrar en él, es una muestra de cariño y admiración a un padre, MELCHOR DÍAZ-PINÉS PINÉS, uno de esos tantos padres del mundo que creen en la familia y luchan por ella, que aman a su tierra, que la trabajan y reivindican con constancia. Es posible que los manzanareños más jóvenes pudieran encontrar en el blog algunos hechos, sucesos, curiosidades, costumbres que ya han desaparecido, que quizás hayan escuchado de sus antecesores o, simplemente, que no conocen y puedan resultarles de interés.

¡Nada más, amigo/a! Gracias por estar con nosotros, con su familia y su sempiterno recuerdo.

HERMANADAS.

HERMANADAS.

M A N Z A N A R E S, en La Mancha.

domingo, 14 de noviembre de 2010

¡ POR TIERRAS MANCHEGAS !.

Para la revista CAMPO, de Sevilla, Melchor Díaz-Pinés Pinés, redactaba una crónica mensual resumiendo lo más destacado del 'agro' en La Mancha. El 9 de Septiembre de 1970, realizó el siguiente reportaje.


La Mancha informa en este mes de Septiembre que a nivel metereológico, nada se diferencia del pasado Agosto, incluso de Julio y Junio. De falta de calor no han podido quejarse los amigos horticultores pues hemos tenido muchos días los 40º C. que han ido muy bien para las huertas. Aunque la sequía ha sido acusada para estos cultivos, siempre queda el consuelo de acogerse al refrán que dice " El que quiera agua, que la saque ". Las aguas subterráneas han respondido muy bien, salvo en contados casos que hubo que hacer uso del trabajo de los poceros.

Lo que La Mancha ha podido presentar en este estío ha sido la explotación melonera, que ha resultado ser abundante y de mucha calidad.  ¡ Quien iba a presagiar que en pueblos como Manzanares, Tomelloso y Argamasilla se iban a producir tantas toneladas de este fruto !. Y además de la variedad que más gusta y cotiza en el mercado, ese melón oscuro y superficie rugosa que tanta aceptación tiene para el consumidor y que tiene su origen en el madrileño pueblo de Villaconejos. Miles de toneladas se han exportado a precios que han oscilado entre las 2 y las 3,50 pesetas/kilogramo que son unos grandes ingresos para los explotadores, con los que hasta hace bien poco nunca hubieran contado. Y tendrán que dar gracias a que el verano ha sido caluroso y seco, consecuencia por la que han logrado una gran recolección de esta cucurbitácea.




La bolsa cerealista se mantiene en el campo manchego, incluso quiere manifestarse al alza, como es el caso de las cebadas, que han superado los precios que marca el Servicio Nacional de Cereales. Las buenas cebadas, limpias y sin saco se pagan sobre cámara a 5 pesetas/kg. Avenas a 5,20, chícharos y almortas a 6,80 Pts/kg, yeros a 7 pts/kg, maices en mazorca 4,50 y desgranado 6,50 pts/kg. Las judías blancas y garbanzos, con la calidad que les da nuestra tierra, no se pagan a más de 15 pts/kg. y es una verdadera pena.

Pero cambiemos de tercio para referirnos a otras cosas que son dignas de comentarse. De todos es conocida la inmensa labor que el Servicio de Extensión Agraria viene desarrollando ante el agricultor pero tampoco es desdeñable la que de algún tiempo a esta parte realiza el P.P.O (Promoción Profesional Obrera) en las más varias facetas relacionadas con el campo manchego. Creado por el Ministerio de Trabajo, desarrolla una gran labor cultural en favor de los agricultores, con cursillos de aprendizaje de la mecánica y conducción de tractores agrícolas y demás máquinas al servicio del 'agro'. De estos conocimientos se han aprovechado pueblos como Villamayor de Calatrava, Fuenllana, Cózar, Alcubillas, Porzuna, Pozuelo de Calatrava, Calzada, Socuéllamos, Las Labores, Malagón, Manzanares, Abenójar, Tomelloso, Argmasilla y muchos más, completando el alumnado los cursos y saliendo de ellos con la posesión del codiciado Carnet de Conducir.

Y para terminar esta crónica mensual sobre los avatares manchegos, decir que en pocos días comienza la vendimia de 1970 y ya se puede hacer una evaluación aproximada del rendimiento de las cepas. Será un treinta por ciento más reducida que una cosecha normal y los culpables son no solo las heladas del mes de Abril sino la enorme sequía soportada durante todo el estío. Como siempre, por estas fechas, cunde el nerviosismo por la problemática siempre existente en cuanto la mano de obra para la vendimia, que será cara y a ver si al menos no faltan brazos para la recolección. Otra gran incógnita es el precio al que se pagará la uva y de ello les informaremos en el próximo reportaje del mes de Octubre. Hasta entonces,.... ¡ Que Dios reparta suerte entre los agricultores !.


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